Las obsesiones se refieren a imágenes mentales, pensamientos, ideas o impulsos indeseables que se producen de forma repetitiva generando gran ansiedad.
Las obsesiones, al ser indeseables, se experimentan de forma intrusiva e incontrolada.
Cabe agregar que hay obsesiones como hay personas en el mundo. Algunos tipos de obsesiones son: a la contaminación, de verificación, al orden y simetría, de fobia de impulso, sexuales, religiosas, de acumulación. Entre otras.
Las obsesiones y sus implicaciones sociales y personales
La mayoría de las personas hemos pasado momentos en los que, debido a épocas de ansiedad, estrés o situaciones difíciles, hemos experimentado una serie de ideas o pensamientos recurrentes e incontrolables, que nos generan angustia.
Sin embargo, al normalizarlas corremos el riesgo de que estos pensamientos se conviertan en obsesiones.
A diferencia de las preocupaciones, las obsesiones tienen un grado superior de frecuencia, tiempo e intensidad, ocasionando un grado mayor de malestar. Adicionalmente en la obsesión, el sujeto no tiene control sobre el pensamiento, es decir muestran mucha resistencia para eliminarlas de la cabeza.
Algunos tipos de ideas obsesivas incluyen:
• Obsesión por el orden y la organización.
• Miedos obsesivos en relación al hogar. Ejemplos: cerrar toda la casa, dejarla luz o el gas abierto, etc.
• Ideas irracionales y obsesivas acerca de la limpieza y las enfermedades.
• Miedos obsesivos a correr algún peligro de tipo físico.
• Pensamientos obsesivos de naturaleza sexual.
Si sientes que tus obsesiones te sobrepasan, agenda tu cita con Mente en Calma.